BASTA DE MENTIRAS ULTRAIZQUIERDISTAS.

Ya estamos acostumbrados a escuchar infamias de la extrema izquierda cuya verdad que dicen defender dista "un poco" de la realidad.

No voy a repasar todas sus calumnias e infamias inventadas y/o distorsionadas según su interés ya que no tendría tiempo ni terminaría nunca, pero lo que haré será analizar dos situaciones que no quedan tan lejanas y que han marcado un antes y un después en la lucha.

En primer lugar, la distorsión que se le ha dado a la reyerta en el metro de Legazpi cuyo resultado fatídico fue la muerte del filoterrorista "Pollo" y la paliza que se llevó Josué (de la que poco hablan).

Ponen a este individuo como un mártir de la lucha antifascista cuando lo único que hizo fue intentar reventar con unos 10 amigos suyos a un joven patriota que iba solo en un vagón. Como es habitual, Josué, debido a su profesión, llevaba un cuchillo que es más que corriente lo lleven los soldados (para maniobras aparte de otras utilidades prácticas cotidianas), el cuál empleó en autodefensa contra dos agresores que iban a matarle, fue un acto instintivo, ya que al haber tal maraña de gentuza agrediéndolo, es normal que viera peligrar su vida.

¿Qué tendría que haber hecho este joven español? ¿No defenderse y dejarse pisotear por una pandilla de desagradecidos apátridas filoterroristas? Lo cierto es que podrian haber sido estos energúmenos quienes acabasen contra la vida de Josué, y os garantizo al 100% queridos lectores, que su muerte no sería llorada nada más que por nosotros y sus familiares.

Ni la prensa antifascista (toda la TV, y periódicos) se hubiera dignado a proporcionar en esa noticia prácticamente ninguna difusión. Ni le hubiera ido el señor Rubalcaba a la madre de Josué a decirle cosas tan profundas como "era uno de los nuestros". TRISTE PERO CIERTO.

¿Y porqué? Pues creo que ya sabemos todos la respuesta, simple y llanamente por discriminación ideológica.

A los ojos de esta asquerosa e izquierdista sociedad, Josué sería un maldito nazi, y Carlos una víctima que se defendió de ese "desalmado nazi-fascista".

No habría manifestaciones masivas a favor de Josué, ni siquiera una placa conmemorativa y mucho menos, los medios bajo ningún concepto entrevistarían a la madre de Josué por si acaso pudiera decir algo en defensa de su hijo.

La ultraizquierda (que tanto dice de respetar a los muertos) se regocijaría de gusto ante tal noticia, poniendo comentarios en sus webs y foros tales como "Nazi ajusticiado" y demás infamias denigrantes...

Tampoco esperaríamos (jamás lo ha hecho y jamás lo hará) que el Movimiento Contra la Intolerancia, liderado por el "queridísimo" Esteban Ibarra se presentase como acusación particular ante estos gravísimos sucesos con connotaciones clarísimamente ideológicas.

Ni siquiera, los del Sindicato de Estudiantes (en el caso en el que Josué fuera estudiante) convocarían una huelga exclusivamente contra las agresiones fascistas; curiosamente en la hoja que se dignaron a repartir estos elementos por los institutos aparecían 3 o 4 personas pateando a un joven de izquierdas que aparecía en el suelo. NADA MÁS LEJOS DE LA REALIDAD, YA QUE JOSUÉ IBA SOLO EN EL VAGÓN DE METRO.

¿Os habéis percatado de qué manera la izquierda distorsiona la realidad? Lo triste de esto, es que la masa inculta y sin ganas de descubrir la verdad que se les oculta, y en otro casos, aún sabiendolo, hacen caso omiso ya que no les importa nada.

Nos encantaría ver el vídeo detalladamente sobre lo acontecido aquél famoso 11 de Noviembre.

En segundo lugar, en el caso de la muerte del chaval de 19 años en Vallecas, apodado "Jelilla", quién se encontraba en el Excalibur (local frecuentado por heavys) celebrando su decimonoveno cumpleaños. Este elemento, acompañado como no, de un nutrido grupo de proetarras se las quiso dar de listo ante unos puertas que estaban trabajando. Empezaron las increpaciones por parte de los antifascistas, ya que vieron un coche con simbología nacionalista y claro esos que hablan de respetar y tolerar pues se debieron de olvidar de ese dogma que parecían defender y atacaron brutalmente a los puertas, a lo que estos, sin vaciles respondieron contundentemente.

A continuación, los cuatro puertas (supuestos neonazis) corrieron a los seis antifascistas y "Jelilla" al huir fué atropellado por un conductor borracho, el cual siguió sin parar varias horas por lo visto.

Pues bien, la Coordinadora Antifascista de Madrid, las Brigadas Anti-Fascistas y demás organizaciones a favor de ETA, alegaron que "Jelilla" había sido atropellado por un supuesto neonazi, dejando al cumpleañero, como otro mártir que a muerto a manos de un fascista cuando está demostrado que es totalmente falso.

Sigue pasando el tiempo y estos grupúsculos que en cada manifestación patriota organizan contramanifestaciones ilegales quemando la ciudad; se niegan a admitir que la muerte del chaval no fué gracias a un neonazi, sino gracias a un conductor sudamericano que iba ebrío. Para colmo han convocado una manifestación a favor del tal "Jelilla" ya que según ellos a muerto "combatiendo el fascismo", nada más lejos de la realidad.

¿Por qué la Coordinadora Antifascista se calla ante la verdad? ¿Por qué no les revela lo que realmente sucedió a sus simpatizantes?

Amigos lectores, la respuesta es sencilla, lo que necesitan estos individuos es crear odio, rencor y violencia contra sus enemigos, los nacionalistas, ya que saben que nos estamos organizando como nunca y nos estamos uniendo. Saben que cada año que pasa somos más fuertes, más serios en la lucha y que nuestros simpatizantes, ante los tiempos de crisis, van clarísimamente en aumento.

Nos pretenden desacreditar con sus viejas artimañanas en plan "es que no puede haber nazis en el Siglo XXI" ya que ante esas proclamas saben que la población se distanciará de nosotros. Pero lo cierto es que nos autodefinimos como Nacional- Revolucionarios, términos que rehúsan utilizar ya que ni la mayoría de ellos saben lo que realmente propugnamos.

SEÑOR@S ANTIFASCISTAS: DESPIERTEN DE UNA VEZ, INFÓRMENSE POR USTEDES MISMOS Y NO RENEGUÉIS DE LA VERDAD.

RECORDAD QUE LA VERDAD NOS HARÁ LIBRES A TODOS.