En tiempos de crisis no nos podíamos esperar otra cosa del sistema que la represión, que ante su debilidad vé con buenos ojos el distraer la atención de la ciudadanía con artimañas político-judiciales como estas en las que, según se han desarrollado los acontecimientos, los malparados son los patriotas, y la policía y el poder judicial los "defensores a ultranza de la seguridad y el bienestar social".Qué decir que ya no sepan ni ellos ni nosotros, no callaréis la voz de la protesta con estas acciones políticas que dicen muy poco de vosotros como tolerantes y mucho de nosotros en cuanto a compromiso con el día a día.
Esperemos que todos los detenidos, a pesar del malestar que les habrá producido las detenciones y demás escándalo mediático, sigan con nosotros en el arduo camino por la verdad y por nuestra querida nación, España, que ahora nos necesita más que nunca.
No nos podíamos despedir sin desearle un cáncer por año nuevo a nuestro querido amigo Esteban Ibarra, quién estará disfrutando gozoso ante tal noticia con sus hijos proetarras ultraizquierdistas a quienes protege y alienta continuamente.
¡¡NI UN PASO ATRÁS CAMARADAS, NO ESTÁIS SOLOS!!
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