¡¡COLABORA!!

Mándanos tus artículos, fotos, noticias a nuestro correo: sotodelrealresiste@yahoo.es te lo publicaremos sin ningún tipo de censura.

martes, 5 de agosto de 2008

España a punto de estallar. Somos más de 46 millones.

UNA VERDAD INCÓMODA
Hace unas semanas, el Instituto Nacional de Estadística dio las cifras de la población española a 1 de enero de 2008 y los resultados han sorprendido a muchos, aunque no a Democracia Nacional, desde luego. Desde DN hemos estado diciendo desde mediados de 2007 que la población española no era de 44,5 millones, como repetían todos los políticos y medios de comunicación, sino de 46 millones, y que el número de inmigrantes no era de 4,5 millones sino de 6 millones, aunque a fecha de hoy ya hayamos superado los 6,5 millones de inmigrantes. Una vez más, el INE ha demostrado que DN tenía razón.






El número exacto que da el INE son 46,06 millones de habitantes, incluidos 5,2 millones de inmigrantes. Recordemos que el 1 de enero de 2007 el INE daba una cifra de 4,4 millones de inmigrantes, lo que nos da la increíble cifra de 800.000 inmigrantes más en un solo año, a los que habría que añadir los que no se empadronan, por lo que podemos hablar de cerca de ¡¡un millón de inmigrantes más en un solo año!! Nos parece increíble que un dato tan escandaloso haya sido prácticamente ignorado por todos los medios de comunicación. Porque no son sólo los 5,2 millones del INE, a éstos hay que añadirles los 700.000 nacionalizados, los cientos de miles de hijos de inmigrantes que ya cuentan como españoles en las estadísticas y los cientos de miles de ilegales que ni siquiera se empadronan.
El panorama es aterrador porque esta invasión sin precedentes en nuestra historia coincide con una crisis económica que puede ser devastadora para España. En 1999, el PP de José María Aznar abrió las puertas a millones de inmigrantes, un proceso del que Mariano Rajoy, como Ministro de Interior y por tanto, máximo responsable en inmigración, fue uno de los principales responsables. Luego vino el PSOE y las cosas continuaron igual. La regularización masiva de 2005 abrió la caja de los truenos y desde entonces se han disparado las nacionalizaciones y el reagrupamiento familiar. Apenas dos años después de terminar la regularización masiva, la poca gente sensata del PSOE se está llevando las manos a la cabeza por la locura que han cometido y están intentado parar la invasión de inmigrantes, aunque parece ser que no va a haber ningún resultado.
Han propuesto un plan de retorno voluntario para inmigrantes. Al principio dijeron que afectaría a un millón de personas, pero al final han tenido que reconocer que, como mucho, sólo se apuntarán entre quince y veinte mil inmigrantes, una cantidad absolutamente ridícula. Los pro-invasión (PP, PSOE, IU, ONGs, banca, patronal, sindicatos, medios de comunicación) nos dijeron que los inmigrantes venían porque había trabajo y que el día que dejara de haberlo los inmigrantes volverían a sus países. Resultó ser otra mentira más, siguen llegando cayucos, siguen viniendo por tierra, mar y aire, de aquí no se larga nadie y es normal, sus países de origen son un desastre sin solución y en ningún país del mundo tienen tantas ayudas, tantos apoyos, tanta prensa y tantos endófobos a su favor como hay en España. Ahora también se ha anunciado la restricción del reagrupamiento familiar. Hasta ahora, este demencial recurso les permitía traerse a cónyuges, hijos, hermanos, padres y suegros. No sólo eso, toda esta gente tenía, a su vez, la opción de reagrupar también a otros familiares directos, por lo que se producía un reagrupamiento familiar en cadena que no se acababa nunca. El Ministro de Trabajo ha anunciado que se recortará el reagrupamiento para que sólo puedan venir los hijos, lo que sólo será un parche, ya que el 80% de los inmigrantes con hijos en sus países anuncian su intención de traerlos a España, lo que supondrá 560.000 niños inmigrantes más en los próximos años.¡¡560.000!!
¿Alguien ha calculado el coste social, cultural y económico de traer a 560.000 personas más de golpe, de los que decenas de miles serán Latin Kings, delincuentes e islamistas en potencia, en plena crisis económica, más todavía pensando que serán receptores netos de ayudas sociales y que no aportarán nada durante años? ¿Alguien ha calculado el devastador efecto que va a tener sobre la sanidad y la educación públicas? No son sólo los niños inmigrantes, la inmigración en general está suponiendo un coste brutal para las arcas públicas. Los ayuntamientos y las comunidades autónomas están en bancarrota debido al gasto que supone la inmigración y llevan meses mendigando dinero al gobierno español porque no tienen un céntimo para cubrir los gastos.
Tenemos casi un 15% de población inmigrante, 6,5 millones de personas, de las que más de cuatro no cotizan a la Seguridad Social y los que lo hacen cotizan de media un 30% menos que un español, y a pesar de que el 92% del dinero que ingresa la Seguridad Social lo pagan españoles, los políticos y los medios de comunicación no paran de repetirnos que “la Seguridad Social tiene superávit gracias a los inmigrantes” ¿Dónde está ese superávit? Los medios de comunicación nos han anunciado que el 80% del superávit se ha volatilizado. Tras diez años en los que, supuestamente, los inmigrantes habían ingresado billones y billones en las cuentas públicas el superávit desaparece en unos meses; tras diez años escuchando la cantinela de que “la economía crece gracias a los inmigrantes”, ahora resulta que, con más inmigrantes que nunca, estamos en plena recesión. Si en la época en la cual el superávit y la economía estaban por las nubes, todo era “gracias a los inmigrantes”, ahora que ambas cifras se hunden será “por culpa de los inmigrantes” ¿o no? Pues no, ni una cosa ni la otra.
La actual situación económica no hace más que confirmar lo que hemos dicho en DN durante años: los inmigrantes nunca fueron la causa del crecimiento económico, sino la consecuencia. Desde DN hemos estando predicando en el desierto que el crecimiento económico español, basado en la construcción e inmigración masivas era insostenible y que acabaría reventando tarde o temprano. Nos llamaron racistas, alarmistas, exagerados y catastrofistas pero el tiempo nos ha dado la razón. Los inmigrantes vinieron con la burbuja crediticio-inmobiliaria y ahora que ésta ha estallado, hay que devolverlos a sus países lo antes posible. Para que no nos acusen de echarles la culpa de todo a los inmigrantes, también decimos que ellos no son los responsables de la actual crisis, pero sí que serán un agravante y una losa inaguantable si no los devolvemos a sus países de origen cuanto antes. Aquí ya no tienen sitio, se han esforzado y trabajado duro y se lo agradecemos, igual que ellos nos tienen que agradecer haberles dado trabajo, vivienda, sanidad, educación, todo tipo de ayudas sociales, seguro de desempleo, y unos derechos y libertades que ni soñaban con tener en sus países de origen. Así que démonos las gracias mutuamente y cada uno en su casa y Dios en la de todos.
La inmensa mayoría, por ser de renta baja, no paga tampoco el impuesto de la renta, pero todos, los 6,5 millones, tienen derecho a prestaciones sociales de todo tipo. Y ahora, mientras miles de médicos españoles emigran al extranjero, nos anuncian que España necesita no sé cuántos médicos extranjeros para atender el aumento de la población. No sólo médicos, necesitamos más personal sanitario y educativo, más hospitales, más colegios, más institutos, más cárceles, más juzgados, más comisarías, más policías, más electricidad, más gas, más petróleo, más agua, más medicamentos, más funcionarios, más infraestructuras de todo tipo…¡¡necesitamos un 15% más de todo!! ¿Y quién va a pagar todo esto? las clases medias y trabajadoras españolas. Y nuestros encantadores liberales diciendo que lo que hay que hacer es “reducir el gasto público de manera radical”, ¿pero cómo se va a reducir el gasto público con una población aumentada en 6,5 millones de personas de las que más de cuatro no aporta absolutamente nada a las arcas públicas? Es imposible.
Ahora se llevan las manos a la cabeza porque Zapatero ha aumentado el gasto público ¿y qué otra cosa puede hacer? No es sólo Zapatero ni los malvados socialistas los que aumentan el gasto público y suben impuestos, las autonomías y los ayuntamientos del PP también los están subiendo, por mucho que repitan que ellos no suben impuestos. Comunidades gobernadas por el PP, como Madrid y Valencia, son igual o más pro-inmigración que el PSOE, ahí están las constantes declaraciones de Esperanza Aguirre a favor de la inmigración masiva. Ahí está el Consejero de Inmigración valenciano, Rafael Blasco, un radical pro-inmigración que le está literalmente tomando el pelo a su electorado valenciano con un estúpido contrato de integración que no va a servir para nada, mientras hace llamamientos a los inmigrantes para que sigan yendo en masa a la Comunidad y mientras se gasta 6.000 millones de euros para la “integración de los inmigrantes” y en cambio, para ayudar a los valencianos a superar la crisis sólo se va a gastar 1.400 millones.
El panorama económico es muy preocupante, ahora la patronal nos anuncia la posibilidad de que el número de parados llegue a los cuatro millones en muy poco tiempo. Pero, señores de la patronal, ¿no han estado asegurándonos durante años mediante “estudios de expertos” que España necesitaba ochocientos mil millones de inmigrantes porque había cientos de miles de puestos de trabajos sin cubrir ya que los españoles eran unos vagos de mierda que no querían trabajar? Ahora que ya se han hecho de oro gracias a la inmigración ya pueden decirnos la verdad ¿no es así?
Si el panorama económico es malo, el social y el demográfico también son aterradores. La islamización se extiende cada vez por más zonas de España, tenemos millones de inmigrantes que ni se integran ni se integrarán nunca, el 75 % de los delitos son cometidos por inmigrantes, las cárceles están a rebosar, tenemos un asesinato al día en Madrid y en otras zonas de España los pandilleros inmigrantes se dedican a sembrar el terror. El tema demográfico tampoco es mejor, estos días los medios de comunicación daban la noticia del aumento de la natalidad española, diciendo que la natalidad había subido del 1,2 a 1,4 hijos por mujer, crecimiento totalmente insuficiente. Además, la noticia era falsa, la natalidad española no ha aumentado, sino que sigue en el 1,2, lo que ha aumentado es la natalidad de las inmigrantes que están en España, algo muy distinto. Con la crisis económica y las hipotecas disparadas, no parece probable que la gente joven se decida a tener muchos hijos y la demencial propuesta de reformar la Ley del Aborto por parte del PSOE, sólo conseguirá empeorar la situación. Por cierto, aún estamos esperando a que alguien del PP diga algo al respecto del aborto, aparte de que “no le interesa a nadie”. Aunque es normal que no quieran sacar mucho el tema, teniendo en cuenta la criminal política de aborto que llevaron a cabo durante sus ocho años de gobierno. Algunos de sus votantes podrían pensar por sí mismos cinco minutos y decidir no votarles más.
Hemos perdido muchos años pero aún estamos a tiempo. España necesita cambios radicales en su política económica, demográfica y de inmigración antes de que sea demasiado tarde, pero para eso, nosotros solos no nos bastamos. Ahora sabes lo grave que es la situación, así que ya no tienes ninguna excusa para no unirte a este movimiento de rebelión nacional que es Democracia Nacional.
Miguel Blasco.Departamento de prensa. (Democracia Nacional)




:::::SOTO DEL REAL CONTRA LA INVASIÓN EXTRANJERA, PRIMERO LOS ESPAÑOLES:::::

No hay comentarios: